Día 2, Etapa 1ª: Ourense - Cea

 Tema de hoy: FLECHAS AMARILLAS

Planta y perfil longitudinal de la etapa:

Hoy vamos a fijarnos en algo que, de verlo, se nos está haciendo natural, en  algo que está ahí, que nos orienta, pero que quizá no hemos profundizado en todo lo que puede aportarnos para nuestro peregrinar y para nuestra vida. 

Reflexiona sobre lo que nos están gritando las flechas amarillas desde su simplicidad luminosa. 

❍ Las flechas amarillas que vamos encontrando a lo largo de todo el Ca￾mino de Santiago son indudablemente imprescindibles para marchar y llegar a la meta. Sin su orientación, nuestro deseo de llegar a Santiago se nos hubiera hecho mucho más dificultoso si no imposible. 

¡Cuántas veces nos habríamos perdido! ¡Cuántas veces habríamos equivocado el Camino! En cada cruce nos habríamos preguntado por dónde caminar, qué dirección tomar... Las flechas amarillas nos indican el camino y hacen que éste sea posible. 

❍ Por otra parte, las flechas amarillas son un descanso para el caminante,  porque no sólo indican el camino sino que además nos dan la certeza de ir por el sendero adecuado, nos dan la seguridad de no equivocarnos … 

❍ Además proporcionan una alegría tranquila al que en un cruce de caminos se encuentra desorientado por no saber qué opción tomar. Sólo el que ha ca￾minado y se ha encontrado con la duda de por dónde seguir ha experimentado la  alegría que supone encontrar una flecha que te confirma por donde debes continuar 

¡Cuánto agradecimiento debemos a las flechas amarillas! 

Se nos han hecho nuestras compañeras inseparables, nuestra ayuda imprescindible, nuestra seguridad reconfortante... 

Ser peregrino conlleva fiarse de las flechas amarillas.

También en el CAMINO DE LA VIDA necesitamos las flechas amarillas. 

Hoy te invitamos a ocupar un rato de tu reflexión-oración personal para descubrir las flechas amarillas que nos están guiando en la vida; las que podrían guiarnos; las que son casi invisibles, pero están ahí si nos fijamos, si tenemos sensibilidad; las que tenemos que pintar para nosotros y para otras personas..., las que tenemos delante de las narices y no vemos o no queremos ver...

Un día de camino da para mucho...

El peregrino es austero, saber vivir y disfrutar con poco. 

Da de lo que tiene y recibe, con agradecimiento, lo que le dan.